Los primeros orígenes de Yoga, son evidencias que datan aproximadamente del año 4500 a.C., el Valle del Indo, antigua civilización que floreció entre 2600 y el 1900 a.C. se ubicaba entre India y Pakistán, los primeros grupos que se establecieron al Oeste y después en el mismo Valle fundaron los grandes centros Harappa y Mohenjo Daro.
Estas civilizaciones demuestran aspectos de gran organización y división del trabajo. En la primera mitad del Siglo XX, arqueólogos e ingenieros ingleses son el propósito de conectar vía terrestre India de Pakistán, destruyen mayor parte del territorio que las dividía y así se descubren los primeros vestigios y sellos arqueológicos de esta gran civilización.
Con las culturas prehistóricas del Valle del Indo, se prepara el primer capítulo de la historia de India, muchos investigadores sostienen que en India ya era conocido y practicado el sistema Yoga, gracias a las influencias de estas antiguas civilizaciones.
Muchos descubrimientos hablan de grandes planos, pozos, puertos y objetos que apuntan a un gran imperio, algunos de estos hallazgos, tienen influencias indígenas, tales son los sellos (figuras cuadradas talladas) son figuras y dioses sentados en posturas de yoga, rodeados de animales y simbología desconocida.
Es posible que muchas disciplinas del yoga, surgieron a través de prácticas chamánicas indígenas, como el control de la respiración, la danza, los sonidos, la meditación, las abstinencias y restricciones.
Podemos entonces concluir que Yoga es una ciencia que se desarrolla a lo largo de los milenios y ubica a este sistema en el bienestar físico, mental y espiritual del hombre.