Bien dicen que no hay mayor riesgo en un negocio que la ignorancia, y vaya que es muy cierto.
Según un boletín de prensa publicado por INEGI el 13 de julio de 2016, se difundieron estadísticas sobre MIPYMES mexicanas. Entre los principales resultados, se dio a conocer que del 100% de las empresas consideradas en la muestra, 97.6% fueron microempresas, 2% empresas pequeñas y las medianas representan tan solo el 0.4%.
Un dato importante que dio origen e inspiración para escribir esta nota es que sólo el 12.6% de las empresas consideradas en la muestra, dan capacitación a su personal. Dentro del total de las empresas medianas, el 73.7% lo hacen, de las pequeñas solo el 55.8%, mientras que en las microempresas, solo el 11.5% capacitan a sus empleados.
En el sector manufacturero, solo el 13.3% de las MIPYMES capacitan al personal, en las empresas de servicios el 20.9%, mientras que en el sector comercial solo el 7% lo hace.
Este estudio no solo nos muestra los resultados en porcentaje de capacitación, también nos explica las conclusiones de por qué las empresas no dan capacitación a los empleados. La mayoría de las empresas no capacitan a sus empleados porque creen que poseen las habilidades y el conocimiento adecuados para desempeñar sus funciones; la segunda razón es el costo elevado de los programas de capacitación, la tercera razón es porqué interrumpen la producción u operaciones regulares del negocio y finalmente porque se capacitó en años previos.
Los datos anteriores sólo demuestran que tal pareciera que la importancia que se le da a la capacitación en una empresa, es directamente proporcional a su tamaño. En general los dueños y tomadores de decisiones en las MIPYMES no prestan atención a esto, están demasiado enfocados en la operación del negocio, centran su atención a las ventas, a la reducción de costos, al pago de impuestos y otros temas de negocio porque no se han dado cuenta que un buen programa de capacitación los ayudará a mejorar en el resto de las operaciones de la empresa.
La capacitación es un tema de ganar-ganar, el empleado enriqueciendo y fortaleciendo sus habilidades profesionales y la empresa garantizando que las actividades de ese empleado estarán enriquecidas con la capacitación que se le ha dado.
Además de lo anterior, las empresas pueden tener varios beneficios al capacitar a sus empleados, entre los que destacan:
- La capacitación conduce a una mayor rentabilidad y mejores actitudes de los empleados ante sus actividades y los retos.
- Promueve la buena relación entre jefes y colaboradores.
- Reduce la tensión y nos permite manejar de manera más asertiva los conflictos.
- La toma de decisiones se vuelve un proceso más fácil y rápido.
- Ayuda a la formación de líderes que más adelante nos ayudarán en la conducción de la empresa.
- En algunos casos, la capacitación subsidiada por las organizaciones se vuelve acreditable del pago de impuestos.
Sin duda, la capacitación es la mejor inversión que una empresa puede hacer, teniendo empleados capacitados no sólo garantizas la operación continua y óptima, también tienes un ambiente más agradable de trabajo y mayor retención de talento; podrá parecerte caro, pero el costo más caro, lo repito, es la ignorancia.