Cuando llegue el momento de elegir un préstamo es importante que sepas que tipo de tasa de interés tiene. Ya que esto te va a permitir saber si a lo largo del tiempo tus cuotas van a ir aumentando o no.
Tasas Variables
Las tasas variables están directamente ligadas a la inflación. Este concepto hace referencia al aumento de los precios de los bienes y servicios, de forma sostenida y generalizada a lo largo del tiempo. Explicándolo de manera más detallada podemos decir que entendemos por inflación al aumento de precios de manera constante y de la mayoría de los productos en general. Si aumentara un solo producto, no estaríamos hablando de inflación.
¿Cómo repercute esto?
Las tasas variables se manejan por los índices de inflación. Cuanto más sube, más alta va a ser tu cuota, ya que la entidad financiera decide aumentarla para compensar el alza de los precios.
El problema es que no sólo sube tu cuota, también suben todos tus otros gastos, y muchas veces tu sueldo no acompaña estos aumentos. Es por eso que es importante chequear qué tanto puede subir tu cuota, para ver si vas a poder abonarla.
Tasas Fijas
Por el otro lado encontramos las tasas fijas. Es decir, que tu cuota siempre se va a mantener igual. Ya que desde el momento en el que sacas el préstamo se congela la tasa de interés del mismo.
¿Por qué te conviene una tasa fija?
Porque sabes que no importa lo que pase con la economía del país, vos siempre vas a estar abonando lo mismo. Además, con el pasar de los meses la cuota te va a ir resultando más liviana ya que tus ingresos van a ir aumentando producto de los ajustes por inflación.