Sin duda alguna, el género de terror ha sido de los más rentables dentro de la industria del cine, muchas veces sin importar la calidad del filme. Si hablamos de calidad y terror no podemos evitar pensar en El exorcista que a más de 41 años sigue siendo la película de terror por excelencia.
El exorcista, es una película de terror que nos narra la historia de Regan, una niña de 12 años; dirigida por William Friedkin y protagonizada por Ellen Burstyn, Linda Blair, Jason Miller y Max Von Sydow y escrita por William Peter Blatty, quien se basó en su novela del mismo nombre; inspirado en un hecho verídico que escuchó cuando estudiaba en la universidad, en 1949, de un niño de 14 años de Maryland, EU, que estaba poseído por el demonio.
Tras su estreno en diciembre de 1973, la gente que acudía a las salas de cine salía aterrada, llorando, vomitando, había otros que ni siquiera terminaban de ver la película, y gente al concluir la cinta iba a la iglesia creyendo que estaba poseída por el diablo. Era la primera vez que una película provocaba ese impacto psicológico en la gente.
Antes y durante el tiempo de filmación de la película ocurrieron varios hechos extraños, entre los que destacan que varios de los familiares de miembros del equipo y reparto murieron, como Jack Mac Gowran que falleció después de filmar su muerte dentro de la película; así mismo, el incendio de set completo sin razón aparente.
También hubo varios infortunios como la lesión que sufrió Ellen Burstyn en la escena en la que Regan la abofetea, ya que para dar la impresión de que ésta tenía una fuerza fuera de serie, la amarraron a una cuerda, y al momento de la bofetada, la cuerda tiro con más fuerza de la esperada provocándole una lesión permanente en la columna, así que el grito de dolor que da la actriz en verídico.
Para elegir a la niña que interpretaría a Regan pensaron en Carrie Fisher, pero en las sesiones de casting, cuando audicionó Linda Blair, con solo 12 años y quien ya había leído el libro, estaba llena de confianza al grado de que cuando el director le preguntó que si sabía lo que tenía que hacer, ella respondió: “Claro, tengo que masturbarme con el crucifijo”; el director Friedkin se mostró sorprendido y le dijo que si sabía que era eso, a lo que dijo: “Pues claro, ya lo he hecho y tú”.
Fue este hecho el que le dio el papel, que no fue nada sencillo pues gente que la reconocía en la calle la golpeaba e incluso le aventaban cosas o evitaban caminar al lado de ella, pues creían que efectivamente pensaban que estaba poseída.
Después de este rol y de su nominación al Oscar la niña parecía tener un futuro prometedor, pero jamás consiguió salir de este papel, ya que sólo filmó películas que fueron fracasos, además de posar para una revista de caballeros.
El director Friedkin y el guionista Blatty tuvieron varios enfrentamientos, ya que el director quería hacer más uso de los “efectos especiales”, a lo que el guionista se negaba, decía que le quitaba esencia a la trama; tanta fue su insistencia, que se tuvo que eliminar en su estreno la famosa escena de la “araña”, en donde vemos a Regan bajando de las escaleras de manera invertida y echando sangre por la boca, sin embargo, esta sí fue incluida en su reestreno en el 2000.
Para esta escena se ocupó a la contorsionista Linda R. Hager, quien estaba sujeta con unos alambres al techo; si observamos bien la escena, efectivamente notamos la cara de la contorsionista y no la de Linda Blair.
Otro hecho, que molestaba al guionista Blatty, era la escena de la cabeza giratoria, decía que le parecía excesiva y ridícula sin imaginar en lo icónica que se convertiría para la película.
Para lograr que girara la cabeza 360 grados fue usada una muñeca de tamaño natural que fue adquirida, tiempo después, por un hombre alemán.
William Friedkin quería captar el miedo real de sus actores, así que para lograr asustarlos, disparaba sin avisar con una arma de fuego, en alguna de las escenas. Como no contaba con la tecnología de hoy en día, tuvo que meter a sus actores a una cámara frigorífica en las escenas donde Regan es exorcizada, para lograr captar el efecto auténtico.
Lo que el director buscaba era aterrar a la gente, así que introdujo de manera subliminal, una cara demoniaca en varias escenas, la cual está inspirada en la película “Onibaba”. La cara pertenecía a la actriz Eileen Dietz, que a su vez era la doble de Linda Blair en varias escenas.
Como punto a señalar, es que Gonzalo Gavira fue el técnico mexicano encargado de varios de los efectos de sonido, él menciona que el “tronido” del cuello de la niña al dar la vuelta completa lo hace con un peine; al igual que para crear tensión en varias escenas usa el zumbido de las abejas. Esos efectos llevaron a obtener un Oscar, en edición de sonido.
Por otro lado, la voz demoniaca de Regan está hecha por la actriz Mercedes McCambridge, quien ya tenía experiencia en radio y había ganado un Oscar; para conseguir esa voz, fumaba un cajetilla de cigarros y tomaba whisky, además, se amarraba un trapo al cuello para forzar su garganta.
La famosa escena del vómito verde, que en realidad era crema de guisantes, a la cara del padre Karras, no estaba escrita en el guión, como a la niña le daban asco las verduras, en el momento de la filmación, Linda Blair se asqueó y movió la cabeza provocando que el supuesto vómito fuera a la cara del actor; la expresión desconcertante y de molestia que vemos es real.
En la escena en que el padre Merry llega, la casa para realizar el exorcismo fue inspirada en el cuadro del pintor francés surealista Rene François Marggrite titulado “ ´L´Empire des Lumierès”, y fue de las primeras escenas en filmarse.
La casa en la que fue filmada la película, está ubicada al oeste de Washington, y fue por muchos años, un recinto estudiantil sin nada en particular, en el cual posteriormente los estudiantes cobraban a los turistas por asomarse a las ya famosas escaleras, en donde se dice, se siente una aura negativa, pero las personas que han habitado ahí niegan haber visto algo paranormal.
Sin duda alguna son muchos los mitos que encierra esta película: que está maldita, que invoca al demonio, entre otras; pero no podemos negar la gran calidad de este filme, que fue un parteaguas en el cine de terror, en cuestión de que empezaron a filmar más sobre esta temática y a utilizar ciertos efectos visuales. Quien vio la película en los 70´s, y la ha visto hoy en día, se sigue inquietando y le sigue causando terror, poco películas logran.